En una oportunidad estaba en mi cuarto no recuerdo que estaba haciendo cuando de pronto alguien me llego de sorpresa sin yo esperarlo, me encontró con la peor facha, con una pijama de niña de la cual se burlo por unos cuantos días. Yo le dije que porque no me aviso que venia, puesto que me agarro desprevenida, como una loca, etc. Y esa visita me dijo algo que en el plano de pareja, familia, intimo, tenia mucha razón, y era que yo siempre tenia que estar arreglada sin importar si iba a esperar una visita o no, porque nunca se sabe quien se presente de repente o pase algo de apuro. Yo como mujer entendida siempre trataba de estar arreglada cuando sabia que alguien especial venia a verme, pero de resto no le prestaba la mayor importancia porque no me imaginaba que podía llegar. Desde ese entonces me siguieron sorprendiendo pero eso no me sucedió mas, ya yo había aprendido la lección y siempre hasta hoy me mantengo preparada, arreglada, lista, venga alguien o no.
Después que sucedió eso el Espíritu Santo me llevo a la misma escena pero en el plano espiritual, y me dijo muy claramente así como te preparas para esperar a una visita, debes esperarme a mi, si para esa persona te arreglas, con mas razón para mi debes lavar tus vestiduras todos los días, así de apercibida en los tiempos debes estar.
Esto fue para mi una revelación tremenda de parte de Dios porque de igual manera el Señor Jesús nos va a sorprender en su venida y debemos estar listos, con ropas limpias, preparados para ese grandioso momento de irnos con el.
Muchas veces esto lo olvidamos o pensamos que puede estar muy lejos de pasar, pero debemos temer a que ese día llegue y el Señor no nos encuentre listos.
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Después que sucedió eso el Espíritu Santo me llevo a la misma escena pero en el plano espiritual, y me dijo muy claramente así como te preparas para esperar a una visita, debes esperarme a mi, si para esa persona te arreglas, con mas razón para mi debes lavar tus vestiduras todos los días, así de apercibida en los tiempos debes estar.
Esto fue para mi una revelación tremenda de parte de Dios porque de igual manera el Señor Jesús nos va a sorprender en su venida y debemos estar listos, con ropas limpias, preparados para ese grandioso momento de irnos con el.
Muchas veces esto lo olvidamos o pensamos que puede estar muy lejos de pasar, pero debemos temer a que ese día llegue y el Señor no nos encuentre listos.
Prepárate para mi segunda venida! 2 Pedro 3:9
(Escrito en mi agenda el 22/09/13).
Autoria Original: Shaysiu García
Imágenes: Internet
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